lunes, 8 de octubre de 2012

Sensaciones de un Congreso

Ya son un par de días los que han pasado desde que tuve la enorme satisfacción de poder participar de forma activa en el Congreso de Contenidos Educativos Digitales que ha tenido lugar en Mérida los días 4, 5 y 6 de octubre de 2012.

Son muchas las cuestiones que allí se hablaron, y desde este blog felicito a los organizadores, (especialmente a @antoniomonjef y @antpaniagua) del mismo pues fue sencillo a la vez que gratificante compartir espacios, ideas y opiniones con compañeros y compañeras docentes, con personas de la Administración Educativa e incluso con empresas que buscan su "pan" en estos lugares (al tiempo que patrocinan).

Me gustó:
  • Encontrarme con un gran número de docentes con ganas de cambiar y/o cambiarse para mejorar esto de la educación.

  • Percibir como, como una especie de "núcleos de cristalización" las TICs tienen apuntalada, ya sin paliativos, la Educación en Extremadura y en España.

  • Las Comunicaciones, los debates y las mesas redondas a los que tuve la posibilidad de asistir, que ponen de manifiesto que tenemos un profesorado animado, ilusionado y convencido, y por supuesto crítico.

  • Convivir con muchos de mis amigos virtuales docentes que andaban por allí, como: @carlosjmedina,  @jcuerva,@jfern,@idocente,  @anibaldelatorre,  @luismiglesias,  @villaves56,  @fisqui,@mertxejbadiola,@ubibebe, @antoniomonjef, @antpaniagua..., y otros muchos que espero no se enfaden por no nombrarlos.
No me gustó:
  • Que la palabra Crisis saliera poco en las intervenciones estando tan presente en la Sociedad Actual. No creo en soluciones que se salten este concepto ni en las que parece que la obvian.

  • Que los políticos se levantaran demasiado pronto cuando hablaban los docentes.

  • Que se hablase poco de los últimos beneficiarios de estos Congresos, los alumnos y alumnas.
Balance final. Positivo y expectante.


viernes, 21 de septiembre de 2012

De nuevo...Ley de Educación

Se confirma aquello de "tenemos un dilema los docentes".

Hoy en prensa se confirma la que parece será la séptima ley orgánica de la democracia española en el ámbito educativo (Ley de Mejora de la Calidad Educativa :LOMCE) .

No conozco aun los pormenores de este documento. Por ahora, y según el cristal con el que se mire  las opiniones que subyacen de él son variopintas, desde una "vuelta a las aulas de los 60", la reforma que "suprime la selectividad", o la reforma que "acabará con el fracaso escolar". Sin sorpresas, cada cual arrima el ascua a su sardina, y la prensa y los medios, enarbolan pendones sobre lo necesaria o segregadora que puede llegar a ser esta ley. Como siempre.

Uno visita las redes sociales, y por allí, alumnos y profesores no andan muy contentos. De nuevo, como antaño, se acude a grandes titulares ideológicos, a grandes y altisonantes comentarios para dar fe de lo mismo de siempre: "Yo mando, estoy legitimado por las urnas, y quiero dejar para la historia mi ideario en forma de ley". Pues nada, allá vamos.

Pena da, como siempre en este joven democrático país, que rojos, azules y naranjas no sean capaces de sentarse alrededor de una mesa (o en alguna sala de profesores) y se pongan de acuerdo en las cuestiones más básicas a la hora de tomar decisiones en algo tan serio como es este tema. Pena da, que los que realmente pagarán estos desacuerdos sean los que van a asumir en sus carnes las bondades o maldades de esta Ley.

martes, 22 de mayo de 2012

Enseñando con el ejemplo

Hoy es 22 de mayo de 2012. Primavera.

Muchos alumnos y alumnas están aprendiendo hoy una lección importante. Algunos de sus profesores y maestros también. Sus padres, espero, sabrán sacar las conclusiones oportunas de lo que está pasando hoy en las aulas de sus hijos.

Las aulas están VACÍAS, no hay verbos, ni sumas, ni ecuaciones de segundo grado. No hay mapas conceptuales, ni gráficos. Hoy nadie le dirá a sus alumnos que se sienten correctamente, que no coman chicle mientras hablan. Y probablemente pocos reciban hoy la clase esa que les motive para ser médicos, abogados, ingenieros, o cualquier otra profesión.

La clase de hoy está afuera, a modo de ACTIVIDAD EXTRAESCOLAR. Deben tomar nota, ser escrupulosos y críticos y sacar conclusiones sobre las circunstancias que hoy han hecho que muchos de sus docentes se hayan enfundado una camiseta verde, una bandera o lo que ellos estimen apropiado para defender algo que está en la MESA DE LAS APUESTAS, y que los grandes números y los insaciables mercados intentan poner en en entredicho. La Educación.

No quiero ni ponerle adjetivos, pese a ser un pleno defensor de la Enseñanza Pública, no es ese mi deseo ahora, el de adjetivar algo tan importante para esta sociedad. El daño que se le hace a la EDUCACIÓN,  es global. Algunos, tal vez en primera instancia salgan beneficiados y pesquen en río revuelto, pero, a la larga, TODOS SALDREMOS PERJUDICADOS, si no somos capaces de darle el justo valor a la cuestión que hoy nuestros alumnos y alumnas están aprendiendo.

sábado, 12 de mayo de 2012

Tenemos un dilema los docentes

Un tranvía corre fuera de control por una vía. En su camino se hallan cinco personas atadas a la vía por un filósofo malvado. Afortunadamente, es posible accionar un botón que encaminará al tranvía por una vía diferente, por desgracia, hay otra persona atada a ésta. ¿Debería pulsarse el botón?
Tenemos un dilema. Los docentes nos encontramos con un problema que puede resolverse mediante dos soluciones, ninguna de las cuales es completamente aceptable.

Me viene a la cabeza la cuestión del tranvía, y su famoso dilema, con estos días tan turbulentos que tenemos donde los recortes, las reformas laborales, la ratio, las vacaciones del profesorado, y sobre todo la importancia de la educación, se entremezcla con acciones, primas de riesgo,  crecimiento o austeridad, mala gestión o mala herencia...pero, no me me iré por las ramas, y volveré al asunto de nuestro dilema.

Todo apunta que el curso próximo habrá menos docentes y más niños por aula, agravada esta cuestión por una "tardía" incorporación de "sustitutos" si el profesor titular se pone enfermo y el medico (del cual nadie duda de su profesionalidad) le da la baja laboral. Este sería el tranvía que viene por la vía, con esta carga.

Tenemos una vía llena de niños, no todos excelentes, muchos con problemas de aprendizaje que necesitan atención individualizada. Tenemos clases que van a ser más difíciles de "gestionar" por su mayor número de alumnos de estos días que no tiene que ver con los de años anteriores. Tenemos menos recursos humanos y materiales.  También, en esa vía,  hay docentes que están hartos de, por ser funcionarios, ver como les "recortan"  sueldos y aumentan horas. Docentes que trabajan en sus casas corrigiendo tareas, elaborando materiales, rehaciendo cada día su "librillo" pues su materia prima de trabajo cambia muy rápido. Docentes que asumen Actividades Extraescolares con alumnos con gran responsabilidad y tesón. Docentes que para algunos sectores de la sociedad deberían trabajar más pues tienen demasiadas vacaciones. Docentes que se forman para que sus alumnos sean mejores y para así ellos ser mejores docentes. Profesores y Maestros que en demasiadas ocasiones se convierten en la principal referencia educativa de muchos niños y niñas pues sus familias están un "pelín" desestructuradas. Docentes que enseñan a sentarse bien, a no gritar, a respetar a compañeros y a crecer en libertad y respeto. Por esa vía va el tranvía a toda velocidad dispuesto a arrollar todo.

Existe un botón para presionar y cambiar de vía.

En la otra vía hay conformismo, hay un "ande yo caliente y ríase la gente", una preocupación por lo de cada uno, un mirar solamente a dos palmos de nuestras narices, un mirar atrás y echar culpas o un mirar adelante y hacer lo mismo, un circulo vicioso que solo genera más y más conformismo.

Un dilema, si señor, tenemos un dilema.

sábado, 28 de abril de 2012

Educación Publica y Crisis

Ocurrió, el Real Decreto - ley 14/2012, de 20 de abril, de medidas urgentes de racionalización del gasto público en el ámbito educativo. Y cada comunidad está ya manos a la obra con lo que de este decreto lleva dentro.

La prima de riesgo, los vaivenes de la bolsa, las agencias de calificación, lo que dejaron los que se fueron, lo que trajeron los que vinieron, lo que le molesta a la "gente" las vacaciones de los maestros/profesores, la valoración de la profesión docente entre la población..., cuantas cosas.

No pienso buscar culpables, no pienso hacer juicios de valor sobre el antes de ese Real Decreto. Solo relacionaré esos nubarrones negros que asoman por el horizonte de los que hasta hace poco se denominaba Educación Publica:
  • Aumento posible de la ratio por aula a números de otros tiempos con niños de ahora.
  • Dos horas más lectivas por profesor.
  • 10 días lectivos sin profesor que se da de baja, y notificación al cabo de estos días para cubrirla. (Se acabó el cubrir las bajas de 15 días de nacimientos y casamientos).
  • Posibilidad de eliminar lineas de Bachillerato en un Centro si no son rentables
Una escuela con más niños en las aulas, con menos profesores, con clases sin profesor cuando otro se da de baja y con menos optatividad y posibilidades de futuro.

Los alumnos de sobresaliente y notable sabrán nadar en estas aguas (eso espero), pero los de los aprobados raspados, los que andan en la linea que separa el éxito y el fracaso, los que necesitan un poco más de eso que antes se llamaba (espero así siga) atención individualizada, esos...

Ahora estamos en el disparadero, y habrá todo tipo de actitudes y respuestas frente a estos cambios. Un reto en el horizonte, hacer buenos cestos con estas mimbres o dejar que la enseñanza Publica se deteriore y deambule triste por los bajos fondos. Y una reflexión final, en la Concertada Pública y la Privada creo que no habrá tantos nubarrones.

miércoles, 18 de abril de 2012

Pan, Circo y Calidad de Educación

Hace justamente una entrada y al calor del los recortes educativos  por venir uno se afanaba en recordar tiempos que por pasados no fueron mejores, ni que por haber sido propios uno se jacte de haberlos vivido. Lo cierto es que durante estos días la desazón, la incertidumbre y tal vez el desánimo inunda salas de profesores, charlas de café o noches de redes sociales (educativas).


Compañeros que cuestionan con más o menos resignación, sorpresa o "mala ostia", las susodichas que nos quedan por venir y que parece, espero que quien afirma esto, sepa más de docencia que los propios docentes, van a reforzar la "socialización" de los alumnos (van a estar más juntitos) y no se va a producir ni una merma en lo que se viene llamando "Calidad de Educación".

Más alumnos, más horas, más calidad. Esta debía ser una complicada conclusión que nadie hasta este momento había llegado a conjeturar. Con lo fácil que parece, y siempre sin perder el rumbo hacia esa Escuela Pública cada día mejor y de mayor calidad. Pues parece que resuelto.

En el camino, hacia esa excelencia educativa que por supuesto no ha engendrado la Crisis Económica, quedarán, creo,  algunos cadáveres. Nunca se gano una guerra sin muertos. Interinos. Optatividad. Clima Social de los Centros Educativos. Ilusiones. Individualización de la Enseñanza...

Bueno, que no quiero ser yo agorero, pero me da que con estas mimbres, los cestos van a estar pues de aquella manera. Y mientras tanto, en la otra parte del mundo hablando de Elefantes, Acciones Argentinas y demás importancias, que siempre hubo circos.

miércoles, 11 de abril de 2012

Cuando eramos pequeños...

Cuando eramos pequeños. Cuando atravesábamos con dudas y sinsabores la azarosa adolescencia.

Cuando estábamos estudiando en clases con más alumnos que ahora. Cuando conocías a algún alumno que repitió 4 veces 1º de BUP (3º ESO al cambio). Cuando no había actividades extraescolares y la mili te hacía un hombre (lo siento por vosotras, las de aquellos tiempos). Cuando había palmetas y clases de clases, el A, el B y allí, al fondo del pasillo, los "mataos" del C. Cuando los mejores profes les impartían clases a los mejores alumnos. Cuando no había ACNEEs, o al menos no los veíamos. Cuando había escaleras y las sillas de ruedas no iban al cole. Cuando no existía la dislexia, ni los niños hiperactivos. Cuando las ostias, y no todas consagradas. Cuando los muy deficientes.

Uno mira atrás con desazón, y recuerda los nombres de muchos compañeros que no continuaron sus estudios -no todos valen para estudiar decían sus padres o sus profesores-, y recuerda también a los empollones/as, a los pelotas, a las atrevidas, a los golfillos. Recuerda uno la complejidad de esta edad donde se cristaliza la personalidad de los que luego serán adultos. Recuerda amigos que jugaron con la droga, y cayeron. Recuerda amigos que se iniciaron a ciegas en el sexo, y se dieron de bruces. Recuerdo poco inglés y algún Spectrum negro con el que jugábamos al ajedrez.

Pues nada, espero que esos sucesos queden en los recuerdos.

Ratios razonables. Orientación Académica. Actividades fuera del aula. Diálogo y comprensión, y empatía. Heterogeneidad como algo positivo. Docentes de Primera para todos. Idiomas. Nuevas Tecnologías para nuevos tiempos. Desdobles y apoyos para los que más lo necesitan. Accesos y centros adaptados. Atención a la diversidad.

Mala cosa cuando se le pone precio a estas cuestiones y se "hipoteca" la Educación con mayúsculas. Mala cosa cuando pensamos que son estás las cuestiones que van a llenar de verde el panel de las Bolsas o a "tranquilizar" (curioso término) a los de la prima de riesgo.

Que lo dicho, espero que esos recuerdos sigan en el lugar que les corresponde.

jueves, 8 de marzo de 2012

Habilidades y Empatía

Abandono la fluidez y rapidez de las Redes Sociales  para pasar por aquí y dejar algunos pensamientos que en estos días de crisis (y no me refiero a la económica) me hacen poner en valor lo importante de la Educación.

Si antes, cuando las vacas eran "rellenitas", no había demasiado tiempo para los hijos/as pues Papá y Mamá andaban laboreando para poder mantener y/o adquirir un estatus social pleno, ¿qué se les viene encima ahora a los hijos, sometidos a la frustración de sus familiares por no encontrar un empleo y renunciar abiertamente a ese idílico estatus social?. ¿Se convertirán de nuevo los abuelos en superheroes familiares y saldrán en ayuda de este descalabro?.

Si la escuela, ese lugar donde la Sociedad espera se eduquen y aprendan los ciudadanos del mañana, pierde combustible, ¿volveremos a tiempos pasados donde los niños/as se clasificaban hasta con MUY DEFICIENTE, sin entrar a juzgar ni siquiera la razón de tamaño fracaso?, ¿podremos atender a las dificultades y problemas de aprendizaje de los alumnos y alumnas de nuestros días?.

Es curioso como se habla en estos días de paro y bolsa, de imaginación, flexibilidad, adecuación, reformas, recortes...y se olvida tal vez, no lo sé, hablar de INVERSIÓN. Invertir en Educación para tener mejor futuro, solo eso. Tendremos mejores médicos, profesores, jueces y casi me atrevería a afirmar, mejores políticos. Son tiempos de invertir en atención a la diversidad, en recursos para nuestro futuro, ese es nuestro verdadero PLAN DE INVERSIONES o de JUBILACIÓN. Ahora es el momento, cuando galopa sobre nosotros una crisis de valores que espero no debilite a los ya asentados y haya que volver, y valga la redundancia, a ponerlos en valor.  Tiempos de INVERSIÓN en Educación, no tiempo de reproches e ideologías.

Pues nada que me vuelvo a donde vine. 

lunes, 6 de febrero de 2012

¿Cómo mejorarías tu escuela en 300 palabras?

Empieza el 2012, también aquí, entre las ascuas aun calientes de la fragua.
Ya en alguna otra ocasión aporte mis letras al objetivo de http://purposedes.org, esta vez, y con la que está cayendo nos preguntan ¿Cómo mejorarías tu escuela en #300 palabras?.
Allá voy.

Mi escuela mejoraría, y mucho, si las personas que definen las lineas maestras de su funcionamiento fueran maestros, profesores que supieron, y saben, usar la tiza, o la pizarra digital con maestría y que con cualquiera de las metodologías que usen, intentan mejorar el futuro de sus alumnos, que son para él o para ella ese folio en blanco donde se comienza a escribir un poema y  tras varios tachones y enmiendas ve como las rimas hacen que se conmueva el que luego las lee.

Mi escuela mejoraría si no fuera moneda de cambio ni lugar de desahogos de políticos que ven en ella un lugar para salir en la foto. Una escuela en la que por encima de todo primasen los alumnos y alumnas que serán nuestro Futuro. Una escuela como punto de partida de una sociedad mejor, más humana, menos condicionada por los “rendimientos” y/o los “beneficios” de “nosequé” reformas o programas.

MI escuela mejoraría si fuese un lugar de oportunidades, de deseos, de ganas de construir, donde las familias, los docentes y las administraciones navegasen en el mismo barco, donde cuando el viento azota, TODOS, sin miedo y sin flaquezas se aferran a las cuerdas para que no se rompan las velas y no perdamos el rumbo.

Mi escuela mejoraría si hiciera personas libres y sin rencores.